Un gol de Pozo da la victoria al Granada ante el Almería

Ninguno ganó la semana pasada pero ambos avanzan con cierto desahogo en la selva de la Segunda división. El Granada trastabilló en Alcorcón, aunque la herida cauterizó sin escozor en vista del esfuerzo ingente por remontar y las ocasiones creadas cuando el equipo se quedó con diez futbolistas. El Almería puntuó en el Carlos Belmonte, convertido este curso en un campo muy complicado, aunque los del Mediterráneo actuaron con superioridad de efectivos la mayor parte de tiempo. Rojiblancos horizontales unos, verticales los otros, los dos esbozan una sonrisa en este arranque de Liga.

Los nazaríes se han instalado en la parte de arriba con naturalidad, sin levantar la polvareda de las expectativas que aterraron el curso pasado. Los indálicos acarician el sector selecto, con distancia prudencial respecto a la zona volcánica por la que pulularon en el ejercicio anterior. Tienen motivos para felicitarse por este inicio aunque, como en Nochevieja, no conviene engullir las uvas en los cuartos. Tan sólo transcurre el primero del vigente campeonato.

Una victoria podría propiciar que los de Diego Martínez asalten de nuevo la segunda plaza, mientras que para los de Fran Fernández se abriría la posibilidad de dormir en 'play off' si ganan, siempre que se concatenen otros resultados. El entrenador de los locales desea invocar el conjuro que rodea Los Cármenes, terreno sin profanar por los adversarios y en el que se cultivan sólo triunfos después del empate inaugural ante el Lugo. Una mística que intentarán alterar los algo más de medio millar de almerienses que llegarán en caravana por la A-92.

Martínez pierde a Víctor Díaz por sanción para este partido. La decisión lógica es optar por Quini, al que ya asignó la función en Santo Domingo tras la expulsión del sevillano. Retoque habitual, aunque se dará una situación inédita: ante la baja por lesión del zurdo Adri Castellano, sólo habrá dos laterales hábiles en la lista, el propio Quini y Álex Martínez. Ante cualquier coyuntura negativa, el técnico vigués tendrá que inventar alguna solución original.

Esto no quita el sueño al míster, que parece concentrado en implementar mejoras al equipo que ha ido perfilando con el paso de las jornadas y que ha dado pingües beneficios hasta la fecha. En un vestuario que tiene aparcados los egos y que tolera bien las modificaciones tácticas de su preparador, el reto de Martínez es que sean capaces de modular dibujos y alternativas durante el mismo partido, sin necesidad de introducir a otros futbolistas, de manera que se adapten mejor a cada circunstancia del encuentro. La principal virtud del Almería, en este caso, está en la velocidad de su vanguardia, con un auténtico 'sprinter' como Luis Rioja. José Corpas parece llamado a ocuparse del otro filo ante los problemas físicos arrastrados desde tierras manchegas por Juanjo Narváez. Juan Carlos Real dispondrá la magia de la que siempre hizo gala, que no siempre disemina, y arriba prorrumpe Álvaro Giménez con mucha movilidad.

Es un cuadro que mezcla experiencia y atrevimiento, que sólo cuenta con una derrota en la última secuencia de ocho duelos. La historia reciente refleja, además, que el bocadillo se le suele atragantar a la parroquia del estadio del Zaidín. Hace un año cayó, pero opuso resistencia. Igualó una ventaja de los anfitriones de 2-0 que se decantó en la prolongación con el 3-2 de Pedro Sánchez.

Aquel balón con el que el alicantino fusiló la red rival se lo cedió Antonio Puertas de cabeza. El mediapunta, con el corazón 'partío', formaba parte de la segunda unidad de la plantilla de Oltra y ahora ha pasado a capitán general, máximo goleador y quien más se aprovecha de las dejadas de balones y las aperturas de espacios de Adrián Ramos.

No parece que vaya a haber más retoques en la alineación del Granada pese a que quede para la especulación el papel de Fede Vico dentro de la baraja de ataque. El valor directo de Puertas, Vadillo y Pozo por su propensión a encarar la meta contraria les sigue otorgando un aval para la titularidad, aunque el cordobés no ceja en su empeño de volver a salir en el posado inicial y favorecer ajustes.

Diego Martínez anunció su convocatoria esta mañana, sin sorpresas, porque había 18 futbolistas disponibles del primer equipo más Juancho, con licencia del filial pero habitual con los 'mayores'. El descarte por propia decisión ha sido José González.

La del Almería, descubierta antes de la salida de la expedición, incluyó finalmente a Saveljich y Narváez. El primero está llamado a formar parte de la zaga ante la ausencia de Juan Ibiza.

La enfermería del contrario está abarrotada, con Fran Rodríguez, Gaspar Panadero, Samu de los Reyes, Nano y Sergio Aguza. La del Granada está más despejada y en el club tocan madera para que lo fortuito siga actuando a favor y siga la sonrisa entre el público nativo a eso de las 20 horas. A alguien se le torcerá.