La Copa rebosa de oportunidades

Hay quienes piensan que la magia, de existir, es la que cambia el destino. Por ello resulta difícil no asentir cuando alguien asevera que la Copa del Rey es la competición más mágica de cuantas se disputan en España. Lejos de la, en ocasiones, rutinaria liga regular y más aún de la Supercopa de España, el trofeo eliminatorio depara sorpresas y reconduce, para mejor o peor, el rumbo de jugadores y equipos.

Y es que el tópico que relaciona la Copa del Rey con la ilusión o la magia está sustentado en los clubes humildes que han disputado su final (e incluso la han ganado) o en aquellos jugadores que carecían de protagonismo o jugaban en el filial y que, en una noche intersemanal, se convirtieron en héroes de su equipo. Sin ir más lejos, el Granada es uno de esos clubes que tiene como mayor hito histórico haber jugado una final de la Copa (por aquel entonces del Generalísimo, pues fue en 1959) a pesar de perderla.

Las oportunidades, ahora y en clave rojiblanca, son bien distintas, pues no hacen referencia a lo que el equipo pueda lograr sino a lo que ciertos jugadores pueden aprovechar la cita de este jueves en el Martínez Valero de Elche, los menos habituales en este inicio podrían tener ante sí el foco necesario para reivindicarse. Con los rojiblancos enfocados, con toda lógica, en la Liga 1|2|3, la Copa adquiere poca relevancia global pero una importancia específica muy reseñable en el caso de esos jugadores que parecen estar en un segundo plano. La competición del 'K.O.' brinda al técnico pontevedrés la oportunidad de apostar por los más jóvenes, aquellos que han sido promocionados del filial o que incluso siguen a día de hoy a las órdenes de Morilla.

La situación más palpable es la de Aarón Escandell. El guardameta estaba completando una gran pretemporada y una desafortunada lesión muscular le tiró de esa bonita pugna que mantenía con Rui Silva. Con el luso haciendo un trabajo exquisito en Liga y Escandell recuperado, el técnico probará al segundo como titular. Así lo confirmó el pasado viernes en rueda de prensa. Será el mejor escenario posible para ver si el Granada, en caso de lesión o sanción, tiene bien cubierta su meta.

También han ascendido por su meritoria campaña pasada los zagueros Adri Castellano y Pablo Vázquez, que dejaron gratas sensaciones en verano pero han sido habituales descartes para Diego Martínez. Predecible en el caso del lateral zurdo, pues cuenta con un pura sangre como Álex Martínez por delante de él. Bastante más sorprendió la suplencia de Vázquez, al que acabó sentando la opción 'V', que no fue otra que desplazar a Víctor Díaz al centro de la defensa. Castellano y Vázquez partirán, probablemente, como titulares ante el Elche. Al lado del valenciano estaría José Antonio Martínez, que ya jugó algunos minutos en Almendralejo con bastante acierto. El partido de Copa será una de sus mejores oportunidades para hacer temblar a Germán o Quini, toda vez que Víctor Díaz es innegociable en defensa.

Precisamente en la derecha empiezan las complicaciones. Diego Martínez y la dirección deportiva del Granada han confeccionado una plantilla corta y versátil, pero lo extenso de la temporada obliga a ponerse el casco, tomar la linterna e introducirse en la mina nazarí que a la voz del capataz Morilla sigue trabajando para sacar nuevas joyas. Algunas de ellas podrían tener la ocasión de brillar en la noche copera. Es el caso de Antonio Marín, que ha completado varios entrenamientos con el primer equipo y podría ser el elegido para ocupar el lateral diestro. Otra opción, aunque con menos presencia en el plantel 'mayor' es Paco Torres. Martin Hongla y Héctor Martínez podrían acudir a Elche si el técnico quisiera ahorrar el viaje a los centrales titulares.

Por delante, la pareja Montoro-San Emeterio dejaría paso sin mayor titubeo a una formada por Nico Aguirre y el capitán Alberto Martín. Sin embargo, el extremeño está lesionado y sería precipitado alinearlo en Copa. Entra en la terna el nombre de otro canterano que, como Héctor Martínez, fue miembro de la pretemporada del primer equipo. Se trata del capitán del Recreativo Granada, Andrés García, que ha completado tres sensacionales jornadas y ocuparía en la convocatoria el lugar del otro capitán. Todo ello sin descartar que San Emeterio, recién llegado e incombustible, se exprima para reforzar la medular.

La línea de tres mediapuntas, diferencial en el ataque rojiblanco, descansará en Elche. Lo hará por la carga de minutos que ya acogen los músculos de su tren inferior y lo propensos que son a caer lesionados. De hecho, Vico no ha terminado de cuajar en el plano físico y el gaditano Álvaro Vadillo se lesionó el tobillo el domingo. Pozo aparece como titular en todas las quinielas, seguramente con la libertad que acostumbra a darle Diego Martínez pero apostado en una banda.

El enlace entre el doble pivote y el ataque podría encarnarlo José González, uno de los promocionados que más minutos ha tenido. En la otra banda queda, como en la zaga, otra incógnita cuya respuesta podría ser Jean Carlos. En un segundo plano está Víctor Morillo, que también ha entrenado con el primer equipo de manera puntual. Arriba hay un nombre propio, Juancho Víctoria. El gol recaería en él, pues Rodri aún no se ha recuperado y Adrián Ramos debe tomar aire para jugar en casa el domingo.

Sin embargo, el filial es una fuente de la que dar sorbos precisos pues la normativa obliga a todo equipo a jugar siempre con siete jugadores de su primer plantel. Sólo seis canteranos pueden haber jugado en el partido y únicamente cuatro hacerlo a la vez. Esto limita el plan y es arriesgado en caso de expulsión.

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