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Alfredo Aguilar
Convicción

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El Granada atraviesa por un periodo de confianza y convicción que se refleja en la actitud de algunos de sus jugadores fundamentales de un once titular que ya parece muy asentado

EDUARDO ZURITA. AFICIONADO DEL GRANADA

Martes, 31 de octubre 2017, 10:03

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El Granada de Oltra mantuvo ante el Lorca su línea de eficacia de las últimas jornadas. El equipo puede no ser dueño del balón y del juego, pero presenta una pegada espectacular: 9 goles en los tres últimos envites, con sólo dos tantos en contra y uno de ellos de penalti.

No era cuestión de confiarse ante el Lorca. En las últimas seis jornadas el único tropiezo granadinista había sido ante el Nástic, el rival que estaba más abajo de la tabla de todos los que se confrontaron en dicho tramo. El Lorca acudió a Granada ubicado en la zona baja de la clasificación y se temía que los rojiblancos pudieran acusar un exceso de confianza ante el equipo murciano.

El arranque de partido pareció disipar dudas, tras el tempranero gol de Machís aprovechando un rechace demasiado centrado de la defensa lorquina. El venezolano agarró al borde del área un zapatazo de los que gusta prodigar y adelantó a los locales cuando los dos equipos aún no se habían asentado sobre el terreno de juego.

El adelantamiento en el marcador no supuso sin embargo que el Granada consiguiese el dominio del partido. Mientras Montoro daba muestras de su calidad en el control del balón y su distribución, no se encontraba bien acompañado por un Alberto Martín excesivamente fallón en la salida del esférico y algo perdido en el posicionamiento, con poca efectividad en el corte y nula proyección creativa. Sólo el indomable Machís y sus asociaciones con Espinosa llevaban el peligro a la meta de Dorronsoro.

El Lorca tomó el mando del partido mediada la primera parte y llegó a dominar a los rojiblancos, eso sí, sin crear excesivo peligro. Un mal balance defensivo tras un saque de esquina a favor de los visitantes, lo penalizaría el Granada aprovechando la velocidad de Machís, que cayó derribado claramente en el área provocando el penalti que él mismo transformaría. Dos a cero al descanso para el Granada, una consecuencia de la diferencia de pegada a favor de los locales.

La segunda parte arrancó prosiguiendo los mismos derroteros que habían marcado el primer periodo. El equipo rojiblanco seguía confiando en aprovechar los fallos en la salida del balón desde la defensa lorquina, y de hecho Espinosa tuvo el tercero a su alcance tras una buena asistencia de Machís que había aprovechado un nuevo fallo evitable de la defensa del Lorca.

La salida de Abel Gómez al campo coincidió con una intensificación de las oportunidades a balón parado del equipo visitante. A las primeras de cambio, en el primer lanzamiento a balón parado del ex-jugador del Granada, el Lorca acortó distancias merced a Tropi que, tras un despeje de la defensa rojiblanca, empalmó un disparo con potencia y colocación lejos del alcance de Varas. La zozobra local aumentó tras otro saque de esquina también votado por Abel que fue salvado por el portero granadinista cuando ya se atisbaban las tablas. Otra vez el Lorca se había subido a las barbas del Granada y el partido, que parecía encarrilado, se tornaba peligroso para los intereses rojiblancos.

Otro mal balance defensivo del Lorca permitiría una contra del Granada llevada perfectamente a cabo por Espinosa, Joselu y Machís. El pase final del venezolano, otorgado en su momento y de manera precisa, fue magníficamente continuado por Joselu para batir por tercera vez a Dorronsoro. Otra vez, como ocurriera ante el Numancia, el Granada reaccionaba tirando de su pegada para resolver a su favor una situación en que se veía agobiado en el marcador.

Justo entonces Curro Torres tomaba la decisión de arriesgar despoblando su línea defensiva para apostar por más efectivos de ataque buscando acortar distancias. La osadía pronto le saldría cara. Si Darwin Machís había sido un dolor de cabeza con un lateral que intentaba fijarlo, cuando el carril se le otorgaba con amplitud no podía pasar otra cosa que encajar un nuevo gol fuese cuestión de minutos. Otro balón recuperado por el Granada permitió que Pedro asistiese al venezolano en profundidad, y que éste, tras un hábil recorte, consiguiese el tercero de su cuenta y el cuarto del Granada, cerrando definitivamente el partido y su magnífica actuación.

El Lorca se deshizo, y la brecha pudo haber sido mayor si Manaj, que había suplido a Espinosa tras el tercer gol, hubiese estado más ágil de piernas y más acertado en sendas ocasiones, o si el Granada hubiese apretado el acelerador cuando el equipo murciano se quedó en inferioridad numérica tras un derribo al delantero albanés en el borde del área cuando encaraba a Dorronsoro. No hacía falta arriesgar más, y Oltra lo demostró reservando titulares al sustituir al imponente Machís y a la joya del centro del campo Montoro.

El equipo atraviesa por un periodo de confianza y convicción que se refleja en la actitud de algunos de sus jugadores fundamentales de un once titular que ya parece muy asentado. Machís se atreve con casi todo: desmarques, regates, disparos, asistencias…; un vendaval imposible de detener ante el Lorca. La defensa además otorga cada vez menos oportunidades al rival, consolidándose por su centro la pareja Chico Flores y Saunier, de calidad sobrada para la división, y con dos laterales cada vez más afianzados en el aspecto defensivo y compenetrados con sus parejas de ala: Víctor Díaz con Pedro Sánchez, y Álex Martínez con Darwin Machís. Montoro sigue carburando, aunque en la noche del lunes ante el Lorca no estuvo tan brillante como ante Oviedo y Numancia. Quizá Martín es el miembro más descolocado en el engranaje del once actual, no haciendo olvidar por ahora al incombustible Baena. Es en el centro del campo donde aún se aspira a una mejoría que permitiera un mayor domino del ritmo de juego y evitase los periodos de desconexión temporal que sigue acusando el equipo en determinadas fases de los partidos. La próxima jornada en Pamplona ante Osasuna se intuye un duelo donde volver a presentar por parte del Granada las credenciales de aspirante a los puestos de arriba de esta Segunda División.

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