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Granada CF

El delta

El delta
  • LA RESACA

  • El Coliseum se erige en un campo fetiche para el Granada, donde extendió un plan basado en la abundancia de centrocampistas, al que tendrá que encontrarle madurez y alternativas para no decaer

1. Una buena cuadrilla de centrocampistas, que se entienda, repara todas las goteras. Aunque el Granada se ha empeñado en diversificar su ataque durante el mercado con jugadores de enorme movilidad, al final todo depende de su abastecimiento. Si la posta intermedia está ocupada por los futbolistas adecuados a la idea del entrenador, todo fluye hasta sedimentar un delta de dominio en la parcela ancha del campo, allí donde se dirime el pulso del partido.

2. La aparición de René Krhin en la alineación de este domingo rememoró ese triángulo de pivotes que, en otras campañas, ha sostenido al conjunto en etapas bastante favorables, con otros protagonistas. El esloveno se integró como una torre desde la cual se interceptaron los desplazamientos aéreos en los que persistió el Getafe durante el primer tiempo. Rubén Pérez quedó unos pasos por delante, con la finalidad de dar una vía de salida al balón, hostigando también los avances rivales, aunque con una aportación menos limpia. La figura geométrica la completó Javi Márquez, al que tener guardaespaldas le exculpa de ciertas desatenciones. Esto le permite concentrarse en pases venenosos o disparos sorpresivos desde la distancia.

3. Sandoval vio muchas fugas en el equipo ante el Eibar. Se censuró a la defensa, que también fue muy modificada con respecto al encuentro inaugural, pero el entrenador sobre todo atendió a la necesidad de perfilar de otra manera las líneas más avanzadas, con el fin de evitar esa sensación quebradiza que tira cualquier esfuerzo a la basura. La presión, el robo y el manejo se generan de otra manera cuando hay varios sentidos de circulación.

4. Sin la figura real del mediapunta, con Rochina partiendo de un costado pero buscando intervenciones por dentro, y sobre todo con la capacidad expansiva de Success, el Granada renunció a los extremos como tales, en favor de una vanguardia con mayor capacidad de sorpresa. El Arabi interpretó bien la secuencia en la apertura de espacios para sus compañeros, aunque le faltó algo más de ardor a la hora de completar las jugadas, más allá de su precisa definición en el riguroso penalti que le concedieron.

5. La sonrisa de Success es el emblema provisional de este Granada aún por madurar. Como le ha ocurrido a otros tantos delanteros africanos, plenos de potencia pero con falta de fineza al concluir las acciones, el nigeriano encontrará margen de progresión desde la banda, si bien su espíritu intrépido le convierte en una amenaza en el área contraria. Desde Brahimi, la escuadra no ha contado con un futbolista de su habilidad para el desborde, que conduce a que el Granada se plante con más estabilidad en el terreno ajeno y limpie el paisaje.

6. El Getafe anduvo sin pulso durante el primer tiempo. La pena máxima y las manos blandas de Guaita en el disparo de Success dieron una renta al Granada que no por algo afortunada, dejó de ser justa. Atrás, el comportamiento se mantuvo con ejemplaridad. Es noticia tras el caos de Los Cármenes.

7. Miguel Lopes confirmó que si le respetan las lesiones, es un lateral de gran capacidad de intervención en ataque. Lombán se ajustó con una llamativa naturalidad a la zaga, mientras que Biraghi completó una actuación decorosa para llevar tan poco tiempo en la ciudad, aplicado en la protección aunque inexistente en las progresiones.

8. Se alumbra un camino en las manos de los mediocentros, pero durante la segunda parte arreciaron los nubarrones. La carencia de estímulos en el banquillo, debido a que Fran Rico sigue lesionado, junto al aumento de la anarquía en ataque con la presencia de Edgar y Thievy, desencadenaron un cambio de tendencia que benefició a los locales. Poco a poco se aproximaron al empate, circunstancia que no llegó a ocurrir.

9. La situación pudo salir cara al Granada, que puede encontrar distintos métodos de sutura. Con Rico repuesto tendría acceso a un mejor control desde la suplencia aparente, si bien la propia evolución del equipo también tendría que conciliar una mayor solidez de su esqueleto.

10. Aún es pronto para sacarle parecidos a los rojiblancos. Quedan bastantes jornadas para certificar su hoja de ruta y quiénes la interpretan. Hay tanta gente nueva y son tan cambiantes las tendencias de los arranques de campeonato que se hace preciso un plazo razonable para sacar verdaderas conclusiones. Pero mientras nos hacemos cargo de la pinta que adopte, es un comienzo observar que hay un interesante potencial.