El nuevo entrenador del Granada CF, José Ramón Sandoval, decidió utilizar un 4-2-3-1 para el partido que el equipo rojiblanco disputó en el Coliseum Alfonso Pérez, rechazando de esta forma usar el trivote que el conjunto granadino había adoptado en los últimos encuentros dirigidos por el técnico Abel Resino.
El preparador madrileño confió en Rubén Pérez y en Javi Márquez para organizar el juego del Granada y conformar un doble pivote del que se quedaron fuera los mediocentros Manuel Iturra (en el banquillo) y Fran Rico (no convocado).
En el segundo tiempo este planteamiento sufrió una ligera variación puesto que “el colocho” Iturra sustituyó a Javi Márquez en el minuto 68 de partido.